Por fin tras varios intentos por quedar para desplazarnos a este Parque Natural del vecino País Vasco, compartido entre Bizkaia y Álava. Debido a la distancia para comenzar cualquier ruta y que se trata de una zona puramente de senderismo hacen que lo releguemos al verano para tener más tiempo de luz y, sabiendo que es en época estival cuando aprovechamos para ir a Picos o como este año que está previsto acometer Monte Perdido, hacen de este un destino poco valorado.
Pero eran muchas las ganas y las veces que este monte ha salido entre las propestas de ruta del club. No hemos tenido así suerte con las agendas y tan solo 4 hemos quedado para salir a las 7 de la mañana hacia Pagomakurre, aparcamiento del parque desde donde comenzaremos nuestra ruta. Y dejamos como siempre el desayuno para parar y tomarlo de camino. Como ademá Marcos nos "vendió" un sitio perfecto con un montón de alternativas de desayuno, que más podíamos pedir.
Empezó mal la cosa cuando al llega a El Haya, en el límite de Cantabria con Bizkaia, el hostal-restaurante se encontraba cerrado... Como buenos previsores, pedimos que se bajase del coche y antes de buscar alternativa, preguntase si abrían. Y decicimos esperar ya que en unos minutos, a las ocho, iban a abrir. Entre semana será un lugar concurrido y de paso de trabajadores. Pero el fin de semana abren a las ocho "con lo puesto" así que desayunamos lo que pudimos y pedimos 3 bocadillos para almorzar.
Otro detalle del prólogo a la ruta es que por no mirar el mapa y seguir las indicaciones de Google-Maps, dimos una vuelta interesante y nos cominos gran parte de las pistas del parque hasta pagomakurre. Es un amplio parque que cuenta con numerosas pistas y carreteras que conectan los aparcamientos, y podéis imaginar el estado del piso y haceros a la idea del recorrido en coche si a eso le sumamos que hay un montón de rampas y cuestas.
Llegados a Pagomakurre comprobamos que es un lugar muy frecuentado y que el aparcamiento se encuentra abarrotado. La ruta tradicional es la directa a Gorbeia. Mas nosotros hemos optado por subir antes al Ojo de Atxular para intentar hacer algo más circular.
Partimos del aparcamiento en dirección al Ojo de Atxular y la Cueva Aitzkorrigane, a la que no llegaríamos puesto que nuestro camino giraba para dirigirse hacia Arraba. El track que seguimos hace que hagamos más giros de los necesarios pero pudimos recorrer los senderos tras el Lekanda disfrutando de sus bosques y parajes. Alguna que otra foto se la llevaron árboles que se retorcían y brotaban con singularidad digna de retrato.
Una vez descendidos a la pradera en la que pudimos ver dos refugios probablemente privados, nos dirigimos a la senda dirección a Gorbeia, dejando a la iquierda Egiriñao y la cima de Aldamin que visitaríamos a la vuelta del Gorbeia.
Las últimas rampas de ascenso se hacían cuesta arriba y la humedad y calor hicieron que numerosos insectos nos rodeasen e incomodasen en la subida. Aunque fue gracioso compartirlo con los más pequeños, numerosos niños que subían con sus familiares y que no acostumbraban a estar entra tanto "bicho" gritando y retorciéndose, en algunos casos incluso corriendo ladera arriba, para intentar alejanse de los incómodos insectos.
Coronado el Gorbeia(1482m.) tocaba foto y almuerzo. La cima, con su torre de metal e imágen de la Virgen, es muy amplia y permite así que podamos compartir espacio con un montón de excursionistas que allí se agolpaban.
Tras el almuerzo comenzamos a descender, pero antes de bajar de nuevo a la pradera, aprovechamos para subir la cima junto al Gorbeia, Aldamin (1376m.) y ahí dejamos nuestra tarjeta de cumbre, junto a unos vivaks que en esa cima habían contuido junto al montón de piedras que coronaba la pequeña elevación.
Ya solo quedaba bajar a la pradera y, ya sin ganas de intentar el Lekanda, marchamos por la pista al aparcamiento. Bonita ruta y encantados con el parque, esperamos volver para hacer alguna otra de las rutas que hay por la zona.
Puedes ver el resto de fotos en los álbumes del club pinchando aquí.
Y por si te sirve aquí tienes el track de la ruta que grabamos.
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